En víspera de San Juan coge seis cebollas y repártelas en dos frascos con agua. Señala cada frasco con cintas de colores y escribe en cada uno un deseo. Espera a ver cuál de las cebollas brota primero y así sabrás cuál de los dos deseos se llega a cumplir.
Para limpiar un lugar de malos recuerdos debes partir una cebolla por la
mitad y quitarle el corazón, en su lugar colocar un papel en el que habrás
escrito la palabra “DOLOR”. Luego vuelve a “cerrar” la cebolla y envuélvela con
una tela roja bien apretada atada con
tres cintas: una morada, otra roja y otra negra. En noche de luna nueva ponla
en el suelo y arrástrala con una escoba barriendo todo lo malo que en ese lugar
ha sucedido. Tira la cebolla y su envoltorio en un lugar donde haya agua
corriente (un río, una acequia, el mar…). En poco tiempo notarás como esos pensamientos que te atormentaban se habrán difuminado.
Si guardas la piel seca de las cebollas, que usas para cocinar, puedes quemarla cada cierto tiempo en la
cocina y así proteger tu hogar.
Se dice que es de mala suerte conservar
una cebolla pelada, hay que usarla toda o tirar la sobrante.
Si te ha gustado sígueme en Facebook, Twitter y Google+. Puedes escribirme a diariobrujablanca@gmail.com
Un abrazo
No hay comentarios:
Publicar un comentario
¿Qué opinas? Escribe tu comentario